5º fecha: Estudiantes - Huracán

Y TANTO VA EL CÁNTARO A LA FUENTE QUEEEE…

Con perdón de las señoras y señoritas que tal vez no sepan de qué trata el título, pero emulando a los grandes relatores del FIFA 2005 o posterior, hablo de Manolo Lama y Paco González, quienes ya son más conocidos que Macaya y Araujo, y son quienes utilizan esta frase para demostrar la cantidad de llegadas marradas previas a la conquista máxima del fútbol, el gol.

Gran partido ha jugado nuevamente el equipo, recobrando la amistad con la redonda y buscando el arco rival desde el arranque. Con los baches a los que nos estamos acostumbrando lamentablemente, pero con la presión suficiente en el medio campo, que llevó tranquilidad a la línea de fondo, la que cuando fue exigida sufrió demasiado.

Fueron muchas las llegadas de peligro en la primera etapa. Buen arranque y hasta que llegó el tan esperado gol la sensación fue de desahogo, porque parecía que esta noche no iba a entrar. Como en las mejores producciones, todos llegaron a posición de gol, Boselli y Sosa se movieron en ataque correctamente y alternaron posiciones permanentemente, lo que por momentos no benefició al principito que rinde mejor cuando se tira atrás a jugar con la bruja Verón, que como siempre manejó los tiempos y todo el medio campo, acompañado por un incansable chapu Braña que volvió a ser ese león de gran corazón y once pulmones.

Por la derecha llegaron las mejores combinaciones, dónde un muy inquieto Maxi Núñez se juntó muy bien con Angeleri, de gran trabajo, cuyas escapadas llegaron hasta dentro mismo del área, donde pierde una gran ocasión al rematar desviado. Ya lo había perdido Boselli anteriormente en dos oportunidades y otra sobre el final que quiso definir por sobre el cuerpo de Monzón y el remate se fue desviado. Una decena de llegadas durante la primera etapa contra una sola del equipo del chulo Rivoira, aunque buena, porque Esmerado anticipa y remata al palo tras un tiro de esquina de Toranzo. Estudiantes justificaba en volumen de juego y en llegadas la victoria transitoria, pero no lo hacía en el marcador y le daba vida al globo.

Tuvo que pasar media hora de juego para que la bruja le diga al chino, “dejame a mí y fijate” y del tiro de esquina viajó el balón sin escalas a la frente de Boselli que la manda al fondo de la red. Y si, tanto va el cántaro a la fuente queee… llegó el primero. 1 a 0 y como no podía ser de otra manera, un bachecito para el final de la primera etapa.

La segunda etapa mostró a un Huracán muy desordenado, lo que le permitió a Estudiantes afianzarse aún más en el medio campo, achicar las líneas con la defensa y salir rápido de contra con Núñez y Sosa, quienes junto a Boselli se cansaron de desperdiciar situaciones de gol. Que se va a hacer, son esos días vio!!!

Otra vez llegaban y llegaban los hombres de Estudiantes a posición de gol, Sosa, Núñez, Boselli y hasta el mismísimo Braña quien recibe en el borde externo del área grande, remata a COLOCAR y el balón se va cerquita del ángulo.

Por los laterales se seguían mostrando el colo Re, de correcto partido y Angeleri. El medio era de la bruja, como siempre y muy rápidos estaban Sosa y Núñez para salir cómo flechas hacia el área rival. Huracán, que intentó adelantarse en el campo, quedó quebrado y de una carrera del principito que se frena dentro del área, sale un pase sin destino y el rebote es capturado por la bruja que remata, se desvía en Domínguez y 2 a 0. Otro gol que llegó por cansancio, antes un penal errado por Boselli, ganbeta de Núñez que remata por encima del travesaño y otra por derecha que busca centro y de la línea rechaza Paolo Goltz, etcétera. Y por supuesto, después del segundo y con más tranquilidad aún, otro bache de distracciones y relajamiento que duró varios minutos y dónde la visita tuvo lo suyo. Dos remates cruzados que besaron el palo derecho de Orión, de correcta labor y un gran remate desde afuera del área de Toranzo que se estrelló en el travesaño. En el fondo pincha, otra actuación regular del chavo Desábato y buena de Cellay, que borró de la cancha Franzoia.

Con el rival entregado y el resultado sellado, se vinieron los cambios, ingresan Pérez por Benítez y Hoyos por Sosa. Puesto por puesto, aunque poco le duró la chance al pibe de Estudiantes que se fue expulsado de manera ridícula tras una infracción que ni siquiera merecía amarilla. Minutos antes el que vio la roja fue Esmerado en la visita. El árbitro, malo para ambos lados.
La nota negativa fue la quinta amarilla que recibió Verón, que le impedirá jugar el viernes frente a Boca. Al igual que Boselli, pero por conocidas razones contractuales.

Pasó con triunfo y buena actuación la quinta fecha de este torneo clausura. Se vienen tres partido en una semana y sin los seleccionados. Otro desafío por delante, otra prueba de valor para este plantel que en las difíciles da pelea. Esperemos encontrar regularidad en los resultados y en el rendimiento, evitar esos baches donde cae el equipo y que los que salten del banco estén a la altura de las circunstancias, como ya lo demostraran en la cancha de Independiente.

Si a este juego que despliega Estudiantes, se le encuentra regularidad, se ajustan detalles en el fondo y se le agrega un poco más de precisión en la última puntada, hasta el momento, no hay equipo en el horizonte, a excepción de Vélez, que pueda aguantar tanto buen pie y tanta movilidad en ataque ni que tenga el suficiente peso en ofensiva como para inquietar. Este es el camino y deben quedar atrás esos fantasmas de actuaciones pasadas recientes. Estudiantes volvió a acomodarse en el campeonato y ya está a sólo dos puntos de los líderes. El camino es largo aún, HAY EQUIPO, a trabajar para lo que viene.-

Lucas.-